lunes, 31 de diciembre de 2018

Lecturas 2018

Un año más, comparto las lecturas hechas a lo largo de estos doce meses, que como siempre, no han sido todas las que hubiera querido :)

- Estrella Distante. Roberto Bolaño. Novela.

- Crónica del Desamor. Rosa Montero. Novela.

- Dos días de mayo. Jordi Sierra i Fabra. Novela.

- Peces en la tierra, antología de mujeres poetas en torno a la Generación del 27. Poesía.

- Un Mundo Feliz. Aldoux Huxley. Novela.

- Las mil y una noches. Anónimo. Cuento, relato.

- Los pueblos prerromanos de la Península Ibérica. Manuel Salinas de Frías. Ensayo.

- Los renglones torcidos de Dios. Torcuato Luca de Tena. Novela.

- Memorias de una joven formal. Simone de Bouvoir. Autobiografía.

- Puerto Escondido. María Oruña. Novela.

domingo, 30 de diciembre de 2018

Anoche vi sombras
sobrevolando cada estrella
y vaciando la luna
de su primitivo fulgor.
Yo esperaba el complot, paciente,
aguardando una musa furtiva
en aquel baile de luciérnagas
cautivas en botellas de cristal.
Esperaban sobre las barras pegajosas
cientos de copas destiladas de sueños
y huérfanas ya de sabores,
de contacto humano en los fríos cristales.
La vi a lo lejos.
Esperaba , cansada en una esquina,
la Revolución.

jueves, 15 de noviembre de 2018

Bálsamo azul de mis días pretéritos,
castillos de arena en la orilla
que erosionan el espejo de tus aguas
y vuelan con el viento de levante.
Costa de sierra y desiertos
inscrita en tardes de velos violetas,
que duermes la siesta
en desordenados terraos.
Dime, ¿cuantos naufragios has visto?
¿Seguirás ahí después
de que salga el último barco?
Quisiera ser bruma
y deslizarme sobre el mar
o escurrirme entre las rendijas del tiempo
hasta poder asomarme a ti.
Aunque fuera solo un rato.
Me gustaría traspasar el horizonte de tus miradas misteriosas
en algún rincón de aquella ciudad
donde la cerveza era cómplice de las palabras
y en la que tu oscuro intenso
le sentaba tan bien a la noche.
Recuerdo que llegaste a ser recuerdo, demasiado pronto,
en aquella tormenta de abismos
que caía sobre mojado
y que me resquebrajaba la tierra.
Otro día, ya sin nubes,
querría encontrarte sin el velo de las pantallas,
frente a la Alhambra,
toda luna, toda noche.

martes, 13 de noviembre de 2018

Una cortina tejida de luces
ciega con gris al rebaño
que pasta tranquilo, ignorante o consciente,
por las ciudades sin cielo.
Mecánica de trucos baratos
que aplaude la masa,
efervescente.
Otros solo giran la cabeza.
Ejemplares ciudadanos apolíticos y moderados
conforman un vertedero de civilización
en el que bailan la muerte,
agitando felizmente sus copas cargadas de sangre,
consultando sus estados,
oliéndose el culo con el frenesí que impone
esta rápida existencia.
Usan y tiran como respiran,
dice que es ley de vida,
que la locomotora es implacable
y que no te puedes quedar atrás.
Paga y tendrás,
paga y serás libre,
paga y no pienses.
Paga y baila la muerte.

jueves, 1 de noviembre de 2018

Aquel norte...

¿Qué alma tan extraña late
en estos valles brumosos,
en este ajeno norte
de otoño prematuro?
Las nubes se descuelgan lentamente
por bosques casi verticales
hasta dejarme caducifolio
en el frío matinal.
Yo me abandono, primitivo,
a las manchas del cielo gris,
a los susurros del silencio,
al espíritu de las piedra y el musgo.
A Euskadi.

jueves, 13 de septiembre de 2018

¿Qué tiene esta lluvia de septiembre
que barre recuerdos de papel viejo
por las esquinas de esta Granada
que perdí en el mar?
Las aceras mojadas reflejan el cielo plomo,
el aire de la Sierra que cuelga de la Alhambra,
otro tiempo,
más resbaladizo,
más inquieto.
El otoño ceniciento me envuelve
en este arco de reminiscencias
que mojan la tarde y los años
en callejas de portales vencidos de sueño...


jueves, 30 de agosto de 2018

Antigua diosa mediterránea
que ahora vagas, errante casi,
por este mundo envenenado de ruido,
por esta tierra asfaltada de grasa.
¿Qué ocurrió con aquellos
que te veneraban a ti y a la vida
en santuarios y templos
con el perfume del mar?
Abre tus ojos de piedra
y mira al cielo
donde bailan aún
la luna y el sol.
Allí estaré yo, contigo
resbalando hacia la vida
al ocaso y al alba,
de tu mano.

miércoles, 25 de julio de 2018

La frontera invisible

No duermo yo
ni duerme este puerto
de barcos errantes
y maletas varadas
en el sopor matutino.
La música de los equipajes,
de las carreras para el embarque
o de los niños esperando al mar,
flotan en las luces azules de las oficinas.
Luego todos se van.
Y otros vienen.
Y continua, así, este ciclo de trasiegos en esta invisible frontera,
invisible línea a la ciudad,
invisible trazo en el mar.

domingo, 3 de junio de 2018

¿Cuantas madrugadas
no habré tropezado con otros ojos,
antes de retirar los míos torpemente
tras una botella de cerveza?
¿Quienes seriáis vosotras,
musas del sopor nocturno
que naufragasteis en mi poco arrojo
entre la música y la multitud?
Llamadme loco,
pero por encima de vuestro pelo o vuestra talla
siempre me fijé más en vuestras narices.
Si, eso y que nunca supe ligar en bares
no ayudaba.
Flotabais en la noche
como controversias espacio-temporales,
eráis remolinos lejanos
de sonrisas y melenas sin recoger,
volabais como soplos libres
por los bares abarrotados.
Y yo...
Yo solo acertaba a imaginaros
permaneciendo como ajeno espectador
tras el telón de ruido
que siempre desgarra mis palabras.
No me quedaba sino dejar
que desaparecierais en la noche,
y echar palas de tierra
sobre las arenas de la pista.
Siempre os quedabais ahí,
como pequeños abismos de curiosidad.

martes, 29 de mayo de 2018



¿Quién serías tú, Umm al-Kiram?
Hija de rey, poetisa sepultada de tiempo...
Sueña este rojo atardecer de al-Mariyat
con tu fantasma danzando
entre las ruinas de palacio,
donde solo quedan tus versos
revoloteando como luciérnagas
por la oscuridad de los siglos.
¿Cuantas lunas viste desde la Alcazaba,
qué poemas abrazarían tus noches
entre perfumes de azahar y aloe?
¿Quién eras tú, sombra ausente,
pasión errante en la corte?
Cuéntamelo aunque sea en voz bajita,
gritando un susurro que traspase
los mil años que nos separan
en esta medina sin memoria.
Cuéntame quien eras, princesa Umm al-Kiram...
Cuéntame esa historia .

jueves, 10 de mayo de 2018

En esta estación no quiere pasar el tiempo.
Ya no hay reloj que lo marque,
lo rompieron a pedradas,
ni trenes que paren,
solo pasan.

Esta pequeña estación no tiene viajeros
en sus andenes llenos de cristales rotos
y hierbas que van rompiendo
la memoria acumulada entre las losas.

Olvidada por todos, hasta en el pueblo,
aguarda en su ruinosa dignidad
las excavadoras sin domesticar
por eso que llaman progreso.

Esta pequeña estación es un silencio fósil
ahogado en su sala de espera
ya tapiada con cemento,
muda de humanidad.

Aún tiene su nombre escrito,
ni eso le han podido quitar
los grafiteros que la pintaron
con alevosía y nocturnidad.


miércoles, 9 de mayo de 2018

Bienvenidos al mundo del mañana.
Este mundo es un barco a la deriva,
un mundo sin timonel
donde los flujos de incontrolado capital
marcan el ritmo
con monetarios espamos.

El mundo del mañana es hoy,
está siéndolo ya,
con silencios complices
y la hipnosis audiovisual
apagando cada pequeña hoguera.

Aquí no se puede volar,
solo se pueden tener comptencias,
los libros son audiolibros,
la música solo es un programa,
la poesía es ineficiente
y la noche no es
nada más que la prolongación cortocircuitada del día.

Bienvenidos
a las automática vida
a la eterna prisa
a la virtual humanidad.

Bienvenidos al mundo del mañana.

sábado, 21 de abril de 2018

De una batalla perdida
en el borde de un mar
a una mirada cosida
en un lienzo por pintar.

Fue aquel pequeño rey
un gran emperador,
en su propia ley
siempre ganador.

De un hacha de piedra
cortando árbol, hueso, carne
a un manto de hiedra
sobre ruina en la tarde.

Una noche, en palacio,
se escapó un verso,
la música, despacio,
arrancó un sueño.

De un baile de salón,
frente a las barricadas
a un cohete a reacción
de mil toneladas.

En sus templos los dioses
codician las horas
de mujeres y hombres
que les componen odas.

De la tierra el sudor
arrancando un gemido
al canto del vapor,
poderoso silbido.

Lucerna encendida
alumbrando los siglos
de memoria escondida
sin tinta, sin  testigos.

Humano diminuto
fabricando relojes
minuto a minuto
de Clio te escondes.

Mira...

La pequeña escala,
lo corto del tiempo,
palabra y obra
que se llevan el viento.

jueves, 1 de marzo de 2018

Telediario de 24 de febrero

Queridos señores del telediario de RTVE:
Ustedes que predican
desde su púlpito de luces y cortinas
clamores de estados de derecho,
de libertades y modelos de convivencia...
Por favor, infórmenme de cuanto acontezca:
Rajoy tilda de mezcla letal la unión del socialismo
con el populismo o con el oportunismo de la nueva política.

Pero... ¿Por qué se quedan ahí,
tan sonrientes, tan satisfechos,
vaciándose de palabras,
oxidando el tiempo?
Ada Colau no participará en el recibimiento al Rey mañana domingo
con motivo de la celebración del Congreso de Móviles de Barcelona.

Sillones y dedos
entre las bambalinas del compadreo...
Señores del telediario, por favor,
que esto no es serio.
Y mañana les tenemos preparada una entrevista muy especial en el telediario,
para los fans de Operación Triunfo.

(Continua hablando Amaia, de ella, de Alfred,
de la entrevista de mañana. Porque si, será mañana.
No te la pierdas)
Vamos a ver, sois un poco muy cabrones, ¿no?
Bueno, no continuo no vaya a ser
que entre rejas me queráis ver.
... en Venezuela la oposición alerta...
¡Ay! Como diría Labordeta:
¡Coño, a ver si no puede hablar uno aquí!
¡Aeeeee a la mierda, joder!


viernes, 23 de febrero de 2018

Un pequeño fragmento de actualidad a finales de los 70.

Reflexiona Ana sobre las extrañas pautas de convivencia que vivimos. Se perdió la relación grupal y permeable de los barrios, y ahora los ciudadanos se ven sujetos al exilio interior, a la peregrinación urbana: no se vive en la misma casa que naciste, te desperdigas por una ciudad antropófaga y enorme intentando conservar las viejas amistades, separadas de ti por muchas calles. Así, la fraternidad vecinal ha desaparecido y el único contacto con tu entorno son estos gritos, estos llantos y jadeos extranjeros que traspasan las delgadas paredes de tu casa, ante los que guardas una celosa, esforzada indiferencia: es una soledad con muchas puertas, una soledad ciudadana con cerrojos y mirillas.

"Crónica del desamor", de Rosa Montero.

domingo, 11 de febrero de 2018

Océano de datos de todo,
de silencios y ausencias
surcando pantallas multimedia
vacías de esencias.
Las instrucciones son:
Innova, emprende crece, gasta, invierte...
huracán voraz
que huele a muerte.
No te resignes.
Alza una barricada
que no deje pasar
libertad envenenada.
Revolución.
Grito de agua, música de fuego, rumores en el viento
despierta la vida
ahogada en cemento.
Mañana amanecerá distinto.
Sin prisa virtual,
analógico tiempo
donde nada es viral.
Mañana, quizás, habrá más libertad.