domingo, 11 de febrero de 2018

Océano de datos de todo,
de silencios y ausencias
surcando pantallas multimedia
vacías de esencias.
Las instrucciones son:
Innova, emprende crece, gasta, invierte...
huracán voraz
que huele a muerte.
No te resignes.
Alza una barricada
que no deje pasar
libertad envenenada.
Revolución.
Grito de agua, música de fuego, rumores en el viento
despierta la vida
ahogada en cemento.
Mañana amanecerá distinto.
Sin prisa virtual,
analógico tiempo
donde nada es viral.
Mañana, quizás, habrá más libertad.

2 comentarios:

  1. La ausencia de autenticidad,
    bulle en océanos de incertidumbre postmodernista,
    con cierto barniz de mezquindad,
    más en todo conocimiento fluye en demasía,
    la vida se torna en una constante simplista,
    y en la verdad ya no hay piedad,
    ¿qué diferencia ha de haber entre analógico y digital?
    si ya no hay pensamientos grises con prestía,
    solo quedó la vacía crítica de la sátira,
    y las quejas de un mañana que se deshace en banalidad,
    ante una revolución que grita,
    y al alzar la vista diluye en simpatía,
    la añoranza incomprendida,
    que tornan las carencias en necesidad.

    Hoy hay libertad,
    y en el mañana todo perecerá.

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    1. Gracias por tu aportación, Ramón :) A ver si me sumo a tus iniciativas literarias por tu maravillosa ciudad.

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